Tras una siestecita nocturna y una sesión de tetris en el vuelo de easyjet con mi primera amiguita Erasmus (Sagra, de Toledo); al fin tomo suelo parisino. Mientras, el cielo nos recibía gris y húmedo, para irnos conociendo. Después de un viaje casi interminable desde «l’aérogare», llego a Opera, donde: no encuentro el metro, me meto a un cercanías, pregunto a un chico (primera prueba superada! me entiende y yo a él!) que me manda a otro metro al lado para terminar haciendo un trasbordo absurdo, pasando por un taquillero que me ha estafado 5€ ¬¬…
Pero AL FIN llego a Sully Morland donde me esperaba Laia… Tiene delito no vernos en 2 años por Madrí (tras el curso de monitoras casi) y vernos en París! Ella está de Erasmus este semestre, y hasta fin de mes ocuparemos la casa de su yaya en lo que encuentro un piso :)
En general el día ha sido de descanso y poco-nada productivo. Hemos dado un paseíto a Notre Damme (10min andando!!!), charlado un montón, siesta inmensa e ido a la Bastilla a por rico sushi para cenar :D
Es curioso porque sé que estoy aquí… en PARÍS, pero aún no me termino de hacer a la idea. Me hace gracia que no me choca oír a la gente hablar en francés, aunque a priori pille lo justo, pero de aquí a unos meses estaré hecha toda una maruja cotilla jijiji
Gracias a Laia y a sus contactos, podemos conectarnos a internet a una red wifi gratis que al parecer hay por toda la ciudad, y aunque haya que identificarse cada poco, es suficiente. Lo más curioso de todo, es que la contraseña no es otra que nuestro alimento típico más famoso! Me pregunto de dónde habrá salido esta cuenta, algun Erasmus generoso quizá?
También he podido hablar con mi mami por un número mágico que tarifica llamadas al extranjero como nacionales, así que ya les he dejado tranquilos jeje
Acabamos de ver Toy Story 2… es increíble la de frases que nuestra cabeza almacena y que luego no sabemos de dónde son!!
Estoy muertisiísisisisisisima….
Una que va a pasar su primera noche en París!
«Corre como el viento, Perdigón!»
Gallinita Ciega 